Duatló de muntanya Pèlags, Vilobí del Penedès

Primera competición del 2018, y primer duatlón de montaña que disputo... 

Con la cantidad de entrenos que he hecho estos últimos meses esquivando la carretera gracias a la BTT, nuestro capitan de montaña Gregory envió un mail intentando reclutar y motivar a hacer un equipo numeroso para la última prueba del circuito de la temporada de duatlón de montaña, y no pude decir que no.


A priori, el circuito de BTT tenía que ser poco o nada técnico y discurrir todo por pista y algún que otro sendero, pero parece ser -sin conocimiento por mi parte y escondiéndolo a propósito por parte de Greg- que lo habían cambiado por uno algo más técnico.

Al lío con la crónica! 16 componentes del equipo (con 2 bajas de 2 chicas de última hora por lesión) no es moco de pavo, gran poder de convocatoria y que al final el uno por el otro se fueron animando.

Observación: Los pelos no me crecieron lo suficiente desde la última depilación como para entonar y mimetizarme en el ambiente. Aún así, al salida fue rápida como en todos los duatlones, y aprovechando que el primer km era por asfalto y ancho, me pongo a ritmo alto (4'02" con alguna subida importante) pero luego, conforme vamos entrando por senderos y más subidas, el ritmo y las ansias de correr rápido bajan en picado.

Imagen: "acabo de oir que el circuito lo han cambiado a algo más técnico"

Estabilizo ritmo, pulsaciones y posición hacia el km 3-4, y un poco más adelante reconozco el respirar detrás mío de Greg en una subida estrecha, que me pasa mientras voy pensando que espero que no nos hagan pasar con la bici por aquí (cosa que sí pasó).

6 km con algo más de 150m de desnivel y ya estaba en boxes, sudando como un pollo (15ºC de temp. ambiente y yo demasiado abrigado). Hago la transición rápida y casi pillo a Greg de nuevo, pero ni quiero ni puedo seguirle. La BTT es otro mundo para mi, y hoy va a ser pura supervivencia.

Sobre el km 2, aproximándome a un charco de barro, me digo, frena un poco y así no te ensucias tanto, y justo al pasar por el charco, me adelanta un amigo que me baña en barro por un lado, jajajaja. El único charco que había en todo el recorrido y me lo comí entero. Las sensaciones eran horrendas, sin chispa en las piernas, pesadas de las 3h de carretera del día anterior.
Los tramos de pista y sendero los paso bien, tanto en subida como en bajada, los últimos meses de BTT me han dado algo de experiencia, a excepción de algunos tramos más estrechos y algo más técnicos que pongo pie a tierra (al igual que los que iban delante mío), pero la precaución es la tónica general. Ante la duda o el peligro, pie a tierra o bici al hombro. 

Para los amantes del BTT no era un circuito técnico ni difícil, para mi es lo máximo a lo que aspiro sobre las ruedas gordas, ya me tomo la BTT como un instrumento de entrenamiento para la bici de carretera para dicho segmento del triatlón, que es dónde realmente me gusta competir. Como me dijo Txema hace unos días: "Hasta que no te quiten km del Ironman por tener más equilibrio, no me busquéis por trialeras". Para gustos, colores. ;-)

Una vez pasada la primera parte del circuito, la segunda ya sí que era más pistera y mis sensaciones de piernas mejoraron, con lo que empecé a remontar puestos y circulaba a muy buen ritmo, pero dos salidas de cadena me devolvieron al mismo lugar de donde salté, incluso algo más atrás. Hasta entonces, yo pasaba con facilidad a la gente en las subidas y el plano, me recuperaban en las bajadas.


En el km 18 y poco, llegando al último repechón, se me sale la cadena y se queda justo entre el plato y el cuadro, y no la puedo sacar. Así que a empujar la bici en la subida de unos 200m, y el tramo plano haciendo el "patinete". Por suerte, en los últimos metros, ya había bajada, pero me habían adelantado como 20 o 30 duatletas, y perdido no sé cuantos minutos entre la parada y el modo patinete. 

Aún así, seguía 3º del club, con lo que dependían de mi tiempo para la clasificación por equipos (nos jugábamos el ascenso a división de honor) y en el último tramo de 3km de carrera a pie, no me pude relajar, aunque las piernas iban muy tocadas y en las bajadas me costaba no parar para evitar los impastos en mis cuadriceps. Qué ganas de butifarra que tenía !

Llego a meta como 3º del club y conseguimos el objetivo triple de subir de categoría, acabar todos y pasar una buena mañana. Qué más se puede pedir? En grupo todo se lleva mejor. Enhorabuena a tod@s los del club por esta matinal de deporte.

Repetir? Puede... pero a una prueba de dificultad máximo como esta.