Hoy no me puedo levantar... Duatló Vic 2010

Era mi primera participación en el duatló de Vic. No soy gran amante de las duatlones, pero tengo que reconocer que aunque se sufra mucho, son una buena puesta a punto para los tris.

Bajo un sol de justicia (hoy ya tenemos algo de colorcito) llegamos con tiempo a la salida y lo preparamos todo. Me situo bien en la salida y los primeros 7,5 km los intento hacer a ritmo, sin pasarme, que luego hay que hacer bici, y este año aún no había hecho bici después de correr (ni correr después de bici, pero bueno...). La gente va a mil por hora!

Al llegar a la transición, me veo solo y hay un grupito de unos 10 que van a 50m, hago una transición bastante rápida y consigo enlazar con ellos a la salida de boxes... bién!

La P2C esperándome en la T1

El tramo de bici es casi tan bonito como duro, ya que no hay momento para la tregua, se va rapidísimo y no quiero soltar el grupito antes del primer puerto, donde se me van los "escaladores". Tras coronar, en los tramos de descensos tiro de piernas y puedo volver a enlazar y entrar a relevo de nuevo. El segundo puerto es más llevable y consigo -sufriendo- mantenerme en el grupo que antes me descolgó. En el descenso hacía Vic voy bastante rato delante, sin pensar que luego hay que correr...

Sufriendo en la parte final del grupo para no descolgarme en el segundo puerto

De nuevo transición muy rápida, salgo segundo del grupo y a algunos los distancio muchos metros, y segundo tramo de carrera agónico, con las piernas como palos, aunque al final ya corría con algo más de soltura. Perdía alguna posición pero no muchas. Finalmente posición 98 y un tiempo final de 1h46m26s. Balance positivo de la jornada.
Para rematar la jornada, buena mesa y mejor compañía degustando embutidos y carnes de la zona, mmmmmm qué rico! Llegamos sobre las 19h a casa totalmente rebentados, Carmen, Anaïs y yo.

El sábado anterior al duatlón, mientras la gran mayoría pensaban en el Madrid-Barça, pudimos escaparnos al teatro a ver el musical "Hoy no me puedo levantar", presagio de lo que iba a pasar el lunes. 3 horas muy completas y muy recomendables. A mi me encantó la puesta en escena y me hizo recordar a aquel chaval quinceañero de los años 80 que una tarde de verano se pasó varias horas haciendo cola para entrar a un concierto de Mecano en el campo de fútbol del Prat.