Hoy acabo la semana con un dolor de piernas de aquel que a veces, nos gusta sentir, pues es el resultado del esfuerzo y el trabajo bien hecho. Aunque podría catalogarse como una semana más, creo que, tras más de 15h esta semana, los resultados han salido y me da un puntito de confianza para el Half de Calella.El sábado 130km en compañía de Carlos Lopez, Miguel Acedo, Ivan Herruzo, pasando por Rocafort, Mura y Estenalles, en la que no acababa de ir demasiado fino pero que conforme pasaban los km me encontraba mejor.
Así que el domingo, en la prueba celebrada en Cerdanyola y organizada por mis compañeros del servei d'esports de l'Ajuntament, tenía 13,6km de montaña por delante para ver como respondían las piernas tras el machaque del sábado.
Salgo un pelín rápido para lo planeado, y cuando pasan los 2 primeros km empieza la subida y veo que aguanto bién, voy adelantando gente, y así hasta el km 6., flipando con el tiempo, pues normalemente entreno por el recorrido de la carrera y no voy tan tan rápido... La bajada me la tomo un poco más en serio intentando que no se me escapen los que he pillado en la subida, mantengo posiciones y ritmo y así hasta meta, logarando entrar en 57m58s, a 4'15" el km de media, mejorando mi mejor marca en 3 minutos, y 7 min menos que en 2007. O estaba antes muy mal, o ahora muy fuerte..., o las dos cosas.
Esta semana que entra bajaré un poco la intensidad de cara a plantarme en la salida de Calella en la mejor condición posible, a ver que tal sale el primer triatlón del año. Pueden haber muchos factores que te juegen una mala pasada, pero de momento, las sensaciones son inmejorables.