Y es que, después de una semana con pocos entrenos y musha comida (buenísima, pero a la vez malísima), a uno se le queda el cuerpo así...
Así que ahora toca apretar a fondo estas semanas, recuperar algo de lo perdido (nivel de forma), y perder algo de lo recuperado (kilos). Sin más problemas ni agobios, pues aunque sólo he podido correr 40km esta semana y nadar un par de días, las sensaciones siguen siendo buenas.
La semana nos dejó muchas estampas, una muestra de los contrastes culturales y humanos del sur, de las que destacaría la fábula del perrito y el pollito, que algún día explicaré, o no,.. ,y las visitas a Priego, Zuheros (nos costó encontrarlo, pues todo el mundo se refería a éste lugar como "sueros"), y la majestuosa Córdoba con sus 35ºC, su mezquita y sus patios andaluces (era semana de exposición).
La semana nos dejó muchas estampas, una muestra de los contrastes culturales y humanos del sur, de las que destacaría la fábula del perrito y el pollito, que algún día explicaré, o no,.. ,y las visitas a Priego, Zuheros (nos costó encontrarlo, pues todo el mundo se refería a éste lugar como "sueros"), y la majestuosa Córdoba con sus 35ºC, su mezquita y sus patios andaluces (era semana de exposición).